Apoyamos a la industria hacia un futuro sostenible.

Si las previsiones son correctas, el mercado energético tendrá que duplicar su producción entre 2020 y 2050. Si a ello añadimos la continua volatilidad de los precios y la necesidad de más flexibilidad y acceso a nuevas fuentes de energía limpias, la envergadura del reto es inmensa.

Estamos ante uno de los problemas más urgentes a los que se enfrenta el planeta si queremos evolucionar hacia un futuro más sostenible. Es evidente que hay muchas cosas que cambiar, y la industria tendrá un papel fundamental para conseguirlo.

¿Qué primeros pasos debería dar la industria?

La eficiencia energética es el primer paso del camino hacia las cero emisiones netas. Además de aportar más fiabilidad, resiliencia y seguridad, conlleva mejoras de productividad y una reducción del CO2. Ya ha demostrado su utilidad: sin las mejoras de eficiencia conseguidas desde 2020, el mundo estaría consumiendo hoy un 13% más de energía y emitiendo un 14% más de carbono para producir energía.

El vapor lleva más de tres siglos siendo un elemento clave en la industria y continúa siendo indispensable para muchos procesos críticos, como la esterilización o la transferencia de calor. La producción y distribución de vapor es un proceso circular que permite reciclar el agua y recuperar la energía. Hemos ayudado a una empresa de alimentos y bebidas estadounidense a instalar un sistema de recuperación de condensado gracias al cual han podido ahorrar más de 250.000 dólares al año, consumir menos agua₂, reducir las emisiones de carbono y prescindir de fuentes de calor independientes para calentar el agua de alimentación.

Las soluciones de vapor de Spirax Sarco vendidas en 2020 han ahorrado 18,2 millones de toneladas de emisiones de CO2 al año. Eso equivale a 8,8 millones de coches retirados de la carretera, o a la plantación de 828 millones de árboles₃ adultos, y todavía se puede ahorrar más.

La industria tiene muchas formas de mejorar su eficacia, por ejemplo, realizando auditorías energéticas, revisando periódicamente los sistemas e implementando herramientas de optimización basadas en datos.

La tecnología disponible hoy

El vapor representa entre el 35 y el 40%₅ del uso total de energía de la industria, por lo que trabajar en su generación es fundamental para que la industria logre su objetivo de descarbonización. La tecnología actual y las alternativas innovadoras que están a punto de salir al mercado permitirán a la industria beneficiarse de las excelentes propiedades del vapor sin tener que desmontar su infraestructura actual.

La industria debe saber que no hay una solución única, sino un abanico de oportunidades que explotar. Para cubrir la demanda térmica y con las fuentes renovables generando cada vez más energía, el uso directo de electricidad de bajas emisiones en lugar de combustibles fósiles desempeñará un papel importante en la generación de vapor.

Otra forma de ahorrar s instalar elementos eléctricos en las calderas de combustión que actualmente funcionan con combustibles fósiles, con lo que se eliminarían las emisiones de alcances 1 y 2 si la electricidad se produce de forma renovable. La transición a las calderas eléctricas se agilizaría instalando soluciones avanzadas de almacenamiento, como baterías de vapor que almacenan el exceso de energía renovable. Estas baterías se pueden utilizar para gestionar las cargas pico o en procesos descentralizados.

Otra opción es usar hidrógeno verde para calentar agua y generar vapor. Aunque la infraestructura del hidrógeno debe seguir desarrollándose, ya existen calderas híbridas de gas e hidrógeno. Otra solución para las plantas es instalar electrolizadores, que convierten el exceso de energías renovables en hidrógeno que puede almacenarse para cuando se necesite.

Otras opciones pueden ser las bombas de calor para procesos y calentamiento u obtener energía de la combustión de residuos orgánicos que pueden ser subproductos de la producción de alimentos; ésta y otras fuentes pueden utilizarse para reconvertir las calderas actuales, que funcionan con combustibles fósiles, en soluciones biológicas como el biopropano (o BioLPG) mediante digestión anaeróbica o pasar a combustibles sintéticos o electrónicos como el aceite vegetal tratado con hidrógeno o los combustibles Power to Liquid. Estas soluciones son fuentes de energía alternativas que generan bajas emisiones de carbono.

Todas estas tecnologías y fuentes tendrán un papel importante.

La industria debe evolucionar

La industria actual depende del vapor para su existencia. El vapor, o como lo llamamos nosotros, la Tecnología Natural seguirá siendo insustituible por su flexibilidad, eficiencia y fiabilidad transfiriendo calor. Y lo será para todos: desde las grandes plantas petroquímicas hasta las pequeñas lavanderías, pasando por las fábricas de los alimentos y bebidas que necesitamos o para preservar la seguridad de nuestras instalaciones sanitarias.

Ya disponemos de la tecnología para avanzar hacia un futuro con cero emisiones, sin tener que renunciar a nuestros procesos actuales. Con nuevos e interesantes avances tecnológicos, Spirax Sarco y Gestra están ayudando a clientes de todo el mundo a alcanzar sus objetivos de descarbonización.